Para J. Richard Gott, cosmólogo, matemático y físico, profesor de la Universidad de
Princeton, el establecimiento de una colonia autosuficiente en Marte será un giro en
la historia del mundo y en sus propias palabras "una suerte de seguro de vida contra
las catástrofes que podrían afectar las condiciones de vida en la Tierra. Hay que tener en cuenta que nuestro planeta está repleto de huesos fosilizados de especies extintas, lo cual ofrece un testimonio mudo de que estas catástrofes se producen; la esperanza está en la colonización de otros mundos antes de que el presupuesto destinado al programa espacial se agote.
La historia muestra que proyectos costosos, como las pirámides de Egipto o las
exploraciones navales, son con frecuencia abandonados después de un tiempo".
El programa espacial humano tiene ya algunos años, lo que sugiere que debemos colonizar mientras haya oportunidad.
Las colonias siempre han sido a lo largo de la historia de la humanidad un gran negocio que impulsan el establecimiento de otras colonias.
Gott afirma que "las primera palabras pronunciadas en la Luna fueron en inglés, no porque el Reino Unido haya enviado astronautas a la Luna, sino porque Inglaterra plantó una colonia en América del Norte".
Si la historia se repite, pero esta vez fuera del planeta, dadas las últimas noticias, el idioma que predomine en el espacio exterior podría ser el mandarín.
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