Considerado una especie de primo de la Tierra, es 60% más grande que nuestro planeta y orbita alrededor de una estrella como el Sol y esta a 1.400 años luz de distancia de nosotros.
Con este nuevo descubrimiento, comenzaron varias preguntas sobre las condiciones de vida en los exoplanetas. Según Jon Jenkins, responsable de la nave Kepler, que encontró el Kepler-452b, vivir allí podría ser un poco difícil al principio.
La alta gravedad podría traer cambios para los cuerpos de los colonos del exoplaneta. "Si estuviéramos ahí, seríamos más fuertes", añadió el astronauta John Grunsfeld. "Nuestros huesos serían más fuertes. Sería como hacer ejercicio todos los días ".
Como el planeta órbita una estrella como el Sol, la experiencia podría ser similar a lo que tenemos aquí. "La sensación será muy similar a lo que sentimos en la Tierra. Además, las plantas terrestres podían hacer la fotosíntesis sin problema ", dijo Jenkins.
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