Está considerado una de las siete maravillas del mundo antiguo.
Fue Salomón quien ordenó su construcción como representación del cosmos.
Conocido también como Primer Templo, según la tradición es el templo hebreo más antiguo de Jerusalén.
El templo de Jerusalén fue un santuario del pueblo de Israel, situado en la explanada del Monte Moria, en la ciudad de Jerusalén donde se ubican en la actualidad el Muro de los Lamentos, la Cúpula de la Roca y la mezquita de Al-Aqsa.
Según lo escrito en la Biblia, la construcción del Templo de Salomón se realizó en el siglo X a.C., para sustituir el Tabernáculo que durante siglos, desde el Éxodo, se venía utilizando como lugar de reunión y de culto a Dios.
Como ocurría frecuentemente en arquitectura, el proyecto del monumento incluía proporciones singulares, como las de los números y medidas que, según la Cabala, corresponden a las proporciones perfectas
Se supone que el edificio tenía sesenta codos (27 metros) de largo, veinte codos (9 metros) de ancho y entre veinticinco y treinta codos (más o menos 14 metros) de alto.
Otras fuentes hablan de ciento veinte codos (54 metros) de largo.
Destruido y reconstruido en varias ocasiones, actualmente solo se conserva el Muro de las Lamentaciones.
En su interior se encontraba un Santuario, recubierto de oro que, según la leyenda, custodiaba el Arca la Alianza.
El Templo del rey Salomón es uno de los más perfectos píos de construcción esotérica jamás realizada; según teorías recientes cierra numerosos secretos confiados a los caballeros templarios
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