La Laguna Ojo de Liebre ubicada en México es un sitio de extraordinario interés ecológico y biológico. El lugar pintoresco es el anfitrión de una gran variedad de vida acuática asombrosa y diversa.
La gente que vive en el área regularmente es sorprendida por la cantidad de criaturas impresionantes que habitan en esta bahía, pero hace tiempo algo extraordinario encallo en la playa incluso más impresionante que los más extraños especímenes oceánicos.
Este espécimen inusual fue recuperado y trasladado a un laboratorio donde los científicos encargados de investigar e identificar a la criatura estaban absolutamente perplejos.
La criatura no parecía ser parte de ninguna especie conocida de animal marino.
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Naturalmente, los biólogos marinos creen que hay miles de especies aún no conocidas por la humanidad que residen en los niveles más profundos de los océanos de la Tierra.
Sin embargo, si se descubren que están cerca de la superficie, entonces esto sería motivo de gran alarma, ya que sugeriría que se están produciendo enormes cambios en el mar profundo que podrían tener ramificaciones significativas para la salud de todo el planeta.
Mientras que los científicos y los ecologistas preocupados por las implicaciones potenciales planteadas por el descubrimiento de este espécimen, la imaginación pública se inflamó por su descubrimiento.
La criatura parecía tener un sorprendente parecido con los monstruos marinos de la mitología local.
Sin embargo, la respuesta resultó ser mucho más mundana y mucho más triste que la teoría del monstruo marino.
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Finalmente, los investigadores de Laguna Ojo Liebre se dieron cuenta de que el espécimen no era en realidad una criatura sino dos. El animal fue identificado como siameses de ballena gris. Los investigadores asumieron que la criatura había muerto en el mar después de haber sido abandonada debido a su discapacidad.
Esta teoría fue cuestionada por la investigadora de la Sociedad Americana de Cetáceos Alisa Schulman-Janiger quien también examinó el cuerpo.
Ella dijo que los cuerpos de los siameses estaban seriamente subdesarrollados. También dijo que el ancho de los gemelos habría sido probable que también haya causado la muerte de la madre.
Se cree que esta es la única vez que los gemelos unidos por la ballena gris han sido recuperados por los científicos.
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