La luna, nuestro majestuoso satélite natural ha sido la fuente de curiosidad de un sinnúmero de personas. Ilumina nuestras noches oscuras y proporciono una manera de navegar para nuestros ancestros.
Pero con los años, y ya que nuestra comprensión del espacio ha aumentado, encontramos alguna información sorprendente acerca de la luna que nos conduce a más preguntas que respuestas.
¿Es la luna realmente satélite natural de la Tierra?
La nueva información ha dado lugar a especulación de lo que la luna podría ser en realidad, una tecnología extraterrestre transportada hasta aquí para examinar el progreso de la humanidad y el impacto que tenemos en el planeta Tierra, o tal vez algo total y terriblemente diferente.
La razón por la que la luna fue traída aquí sigue siendo una gran fuente de especulación, algo que espero que encontraremos en el futuro cercano, pero por ahora tenemos la siguiente información que disipa la noción de que se trata de un cuerpo planetario natural:
1.- La Luna es anterior a la Tierra
Se creía inicialmente que la luna se formo cuando un planeta del tamaño de Marte colisiono con la Tierra. Una parte de los restos del accidente se acumularon y fueron atrapados por la orbita de la Tierra con lo que ahora conocemos como la luna.
Hay otra teoría que indica que cuando la Tierra se formó, el polvo restante se unió para formar un cuerpo celeste que empezó a girar alrededor de la Tierra.
Sin embargo, cuando los materiales de la superficie de la luna fueron traídos de vuelta a la Tierra por los astronautas, los resultados llevaron a descubrimientos sorprendentes, ya que las rocas lunares y el polvo son anteriores a nuestro planeta, que tiene alrededor de 4,530 millones años de edad.
El material que comprende la luna resultó tener una edad de 5,3 mil millones años y el polvo es aún más antiguo, que data de alrededor de 6,3 mil millones de años.
Por lo tanto, la Luna debe haberse originado en algún otro lugar.
2.- La densidad de la Luna
Sabemos a ciencia cierta que la densidad de la Tierra es de 5,5 g / cm3. Sorprendentemente, la densidad de la luna es de 3,34 gm / cm3, alrededor de 3,34 veces la densidad del agua.
Esto se explica por el reconocido científico de la NASA, el Dr. Gordon Macdonald en 1962. Afirmó que si nuestros datos astronómicos están correctos, llegamos a la conclusión de que el interior del satélite natural esta hueco.
3.- Terremotos lunares
Pocos años después de la teoría del Dr. Gordon Macdonald , en 1969, el equipo de Apolo 12 aterrizó en la luna. Aterrizó a 40 millas de su destino previsto.
El alunizaje dio lugar a un terremoto lunar artificial, que tenía características sorprendentes. Tras el impacto, la luna comenzó a resonar como una especie de campana.
Las reverberaciones se prolongaron durante más de una hora. El mismo fenómeno fue presenciado de nuevo cuando el Apolo 13 aterrizó en la Luna y su impacto causó una mayor actividad sísmica, que se prolongó durante más de tres horas.
Esto llevó a la conclusión de que la luna es extrañamente ligera para su tamaño y, posiblemente, que ni siquiera tenga un núcleo, lo que aumentaría de otro modo significativamente su peso.
4.- Tiene insólitamente una orbita perfecta.
Todos sabemos que la Luna orbita alrededor de nuestro planeta en una órbita circular casi perfecta, pero todavía técnicamente elíptica.
Esta órbita natural no podría haber sido capturada por la fuerza gravitacional de la Tierra, como se puede ver claramente en las órbitas elípticas de los otros satélites de nuestro sistema solar.
Esto además alimenta las especulaciones de que la Luna se coloco en su posición y órbita actual por una mente inteligente.
5.- Una órbita estacionaria
Otra cosa rara de nuestra Luna es que su órbita alrededor de la Tierra está completamente estática. Lo que significa que no gira sobre su propio eje como todas las otras lunas de nuestro sistema solar hacen.
Es por ello que cada vez que miramos hacia la luna, vemos el mismo lado de la misma, el lado que da a la Tierra.
6.- Diferencia entre su centro de masa y centro geométrico.
Otra cosa sobre la luna no hemos sido capaces de comprender científicamente es la discrepancia en su centro de masa, que es de alrededor de 2 kilómetros más cercano a nuestro planeta que su centro geométrico.
Esta discrepancia se debe, de acuerdo a nuestra comprensión, debe hacer que la luna se tambalee constantemente… sin embargo, sigue siendo constante.
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