Uno de estos grandes enigmas y misterios, fue realizado en 1972 en la mina Oklo en Gabón, cuando mediciones extrañas de elementos radiactivos llevadas a cabo por técnicos franceses, desembocaron en un extraño descubrimiento, se hallaban sobre un reactor nuclear ancestral.
La única explicación posible, es que hace 1700 millones de años, se generaron las condiciones naturales necesarias para producir la fisión del Uranio en la zona, desembocando así en la formación del único reactor nuclear natural que se conoce en el planeta Tierra.
Otro de los grandes enigmas de África son las esferas de Klerksdorp, encontradas por mineros en Ottosdal, Sudáfrica, son sustratos del precámbrico de 2,800 millones de años de antigüedad.
Bolas de pirita pulida con surcos recorriendo su diámetro, para muchos imposibles, y para otros completamente naturales, apoyándose sobre todo en un estudio del profesor de la Universidad de Luisiana Paul V. Heinrich.
Pero un vistazo a su carrera, hace que salten las alarmas, puesto que tras 15 años sin nada reseñable, la negación de todos los ooparts, incluso sin examinarlos físicamente, hizo que su nombre comenzara a aparecer en páginas negacionistas, a partir de lo cual su carrera se relanzó, con lo que aparenta haber usado la negación sistemática como método para disparar su carrera. Un testimonio altamente dudoso.
Seguramente, el nombre de Dag Hammarskjöld, a poca gente le suene, pero la suya, es una de las muertes, o quizás magnicidio, más misteriosos del mundo.
De nacionalidad sueca, fue nombrado secretario General de la ONU en 1953, puesto en el que permaneció hasta 1961, fecha en la que murió, al estrellarse su avión sobre Zambia, en un viaje oficial.
Recientes investigaciones están mostrando que el accidente no fue tal, sino una brutal operación llevada a cabo por la CIA, y los Servicios Secretos Británicos.
Hammarskjold era un pacifista convencido, que se opuso frontalmente a los conflictos, sobre todo a los generados por intereses occidentales en el tercer mundo, lo que le granjeó demasiados enemigos, y que la inmensa mayoría de gobiernos, no se hiciera preguntas tras su eliminación.
Por un lado, ni un solo testigo habla de accidente, y cientos dicen que el avión del mandatario fue derribado ante el intenso fuego de un avión más pequeño.
Además de ello, pilotos que sobrevolaban la zona confirman que el avión no se estrelló sino que fue destruido en vuelo, y telegramas que se filtraron afirman esta versión. Una investigación independiente encontró que existió un superviviente, pero que no fue tratado en un hospital hasta que murió.
Y por último, ya son varios los ex agentes de comunicaciones de la CIA, que confirman que ese día por sus propias manos pasaron los informes de esa operación que concluyó satisfactoriamente.
Seguramente mucha gente no sabe que es el coltán. Este escaso mineral, mezcla de columbita y tantalita, constituye la clave para la fabricación de numerosos componentes electrónicos de alta tecnología.
El coltán está dentro de tu Smartphone, de tu televisor inteligente, y de prácticamente todo lo que use una tecnología avanzada debido a que usado en condensadores y resistencias, permite reducir su tamaño.
El 80% de las reservas mundiales de coltán conocidas se encuentran en la República Democrática del Congo, lo que desembocó desde 1998 en la conocida como guerra del coltán, en la que gobiernos, rebeldes, y terroristas, se han jugado a sangre y fuego el dominio de las minas del estratégico componente para el primer mundo.
En los últimos 17 años, se estima que esta guerra encubierta no declarada, ha causado la muerte a 4 millones de personas, y ha erradicado poblaciones autóctonas de gorilas, al perder su hábitat, o simplemente baleados porque molestaban.
Las Pirámides de Egipto, son posiblemente, la serie de construcciones más famosas del mundo, y que se han visto rodeadas de misterio desde hace milenios.
Por un lado, las dudas acerca de la forma en la que fueron construidas, por otro, las maldiciones que supuestamente han parecido emanar, en gran parte basadas en la catastrófica cantidad de muertes entre los descubridores de la tumba de Tutankamon, y además, la sorprendente conexión cósmica de estas edificaciones, donde por ejemplo, las pirámides de Krefren, Keops y Micerino, responden exactamente en posicionamiento y tamaño relacionado a su brillo, con Mintaka, Altinak y Alnilam, estrellas que conforman el cinturón de Orión, lugar en donde los egipcios, creían que se abrían las puertas del cielo.
Algunos egiptólogos niegan estas coincidencias, achacándolas a la casualidad.
Todos somos africanos. El ser humano moderno, esa especie de primates homínidos denominada homo sapiens, que estaría llamada a dominar el mundo, se originó en el África profunda hace aproximadamente 200.000 años.
Dos oleadas migratorias masivas, una hace unos 130,000 años, y otra hace apenas 60,000, supuso nuestra expansión por el planeta, colonizando todos los continentes excepto la Antártida.
Así pues, todos los misterios sobre nuestro origen parecen confluir en un mismo punto, el continente africano.
¿Cómo surgimos? ¿Por qué de repente se inició esa migración masiva? ¿Por qué sólo nuestra especie sobrevivió y no nuestros primos Neandertales o Denisovanos?
Sea de la forma que sea, la ciencia deberá mirar hacia África para encontrar respuestas concretas a las preguntas sobre nuestros orígenes, todavía envueltos en la espesa bruma del misterio.
África es un continente apasionante, con una diversidad biológica de grandes mamíferos muy superior al resto de la tierra, con rincones absolutamente inhóspitos, y una situación política confusa que hace que, en muchos casos, se imposibilite la investigación eficiente sobre el terreno.
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