Un portal es básicamente un atajo que lleva al usuario a través del espacio,
e incluso el tiempo, a otros reinos o lugares. Muchos creen que los portales son
dispositivos imaginarios .
Resulta que existen los portales, bueno más o menos, y un investigador
financiado por la NASA en la Universidad de Iowa ha descubierto la manera de
encontrarlos.
"Los llamamos puntos-X o regiones de difusión de electrones", explica el
físico Jack Scudder de la Universidad de Iowa. "Son lugares donde el campo
magnético de la Tierra se conecta con el campo magnético del Sol, creando un
camino ininterrumpido que va desde nuestro propio planeta a la atmósfera del Sol
a 149.600.000 km de distancia."
Ah, el término "portal" en este caso, no es más que un corredor entre la
Tierra y el Sol, que permite la transmisión de partículas entre las dos
esferas… Se acabo un poco la magia.
Observaciones de las naves espaciales THEMIS de la NASA y las sondas
Cluster de Europa sugieren que decenas de estos portales magnéticos se abren y
cierran varias veces cada día. Por lo general están ubicados a unas pocas
decenas de miles de kilómetros de la Tierra donde el campo geomagnético se
encuentra con el viento solar que embiste.
La mayoría de los portales son pequeños y de corta duración; otros se
sostienen durante horas.
Toneladas de partículas energéticas pueden fluir a
través de las aberturas, logrando el calentamiento de la atmósfera superior de
la Tierra, provocando tormentas geomagnéticas, y encendiendo brillantes auroras
boreales. Bien, así que aquí comienza de nuevo la magia.
No hay comentarios.
Publicar un comentario