Pero ahora, por desgracia para los creyentes del fenómeno ovni, un nuevo libro ofrece una completamente extraña y artificial explicación con dos de los personajes mas obscuros de la historia del siglo 20: el dictador soviético José Stalin y el infame nazi “Ángel de la muerte ", el doctor Joseph Mengele
Durante una fuerte tormenta en julio de 1947, un objeto se estrelló cerca de la casa de un hacendado en Roswell, Nuevo México.
En Roswell, la base aérea del ejército cercana , dijo inicialmente que un "disco volador" se había estrellado, pero horas más tarde, se cambio la versión ya que científicos del gobierno llegaron a la zona, se afirmó en cambio que un globo meteorológico se había estrellado.
No hubo en gran parte declaraciones del incidente hasta que en la década de 1970 a través de libros y documentales se hicieron denuncias de las formas de vida extraterrestre que se encontraron en el incidente.
Área 51, el nuevo libro de Annie Jacobsen, se basa en entrevistas con científicos e ingenieros que trabajaron en el Área 51, la base de pruebas ultra secreta en el desierto de Nevada.
Se rechaza la historia de extraterrestres y propone la teoría de que Stalin fue inspirado por Orson Welles famoso adaptador de la radio novela de HG Wells La guerra de los mundos, que provocó la histeria en todo Estados Unidos en su emisión en 1938.
Según el libro, la trama se inició después de que la Unión Soviética tomó Alemania al final de la segunda guerra mundial.
Aquí es donde entra en la historia Mengele. El médico nazi, que experimentó con prisioneros en Auschwitz y huyó a América del Sur después de la guerra, fue supuestamente reclutado para crear un equipo de grotescos niños pilotos a cambio de un laboratorio de eugenesia.
El libro dice que el avión estaba lleno de lo que parecían "extraterrestres" pero en realidad eran niños, de edades entre 12 o 13, que Stalin quería aterrizar en los Estados Unidos y provocar una histeria similar a la emisión 1938.
Sin embargo, el avión, dirigido por control remoto por otra aeronave, se estrelló y los estadounidenses silenciaron el incidente.
La fuente de Jacobsen, un ingeniero jubilado de la ex compañía de defensa EG & G, que se encargaba de los proyectos más sensibles del gobierno de EE.UU., dijo que estaba encargado del proyecto de Roswell en el Área 51 en 1978.
La señorita Jacobsen escribe: "Ellos encontraron los cuerpos junto a la nave que se estrelló. No se trataba de extraterrestres. Ni se les consideraban pilotos. Ellos fueron conejillos de indias humanos. Inusualmente pequeños para ser pilotos, parecían ser niños. Cada uno medía menos de 1.20 metros de altura.
Fueron grotescamente deformados, todos eran iguales.
Tenían las cabezas inusualmente grandes y con ojos de gran tamaño de forma anormal.
Dos de ellos fueron encontrados supuestamente en estado de coma, pero vivos aún
Los ingenieros de EG & G dijeron "ver los cuerpos sería una experiencia sorprendente e inquietante".
Un portavoz de la Fuerza Aérea de EE.UU., dijo: "Aún no hemos leído este libro por lo que no podemos hacer un comentario sobre el."
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